domingo, 30 de septiembre de 2012

Un ansiado encuentro

Huella en Ecuador


Tras algunos contáctos de los amigos de la Tribu con esta singular pareja a través de las redes sociales, supimos que Huella había llegado a Quito, inmediatamente Patricio Quimzo (Sankuda) se contactó con Martín y Maru tripulantes de la Kombi Rutera, al parecer Huella desde que puso sus neumáticos en el Ecuador, se habría enamorado de este país de sueños y de colores. Patricio Quimzo (Sankuda) trató por todos los medios de establecer un encuentro para darles el recibimiento y el apoyo acostumbrado, despúes de algunos fallidos intentos por fin lo logró y establecieron juntos una fecha y un lugar para conocernos, pero al parecer el destino tenía alguna cosa para nosotros precisamente en ese día y a esa hora, es así, que los encuentros se postergaban una y otra vez, parecería un juego y la ansiedad de conocerlos cada vez era más fuerte, pero como les comento el destrino tendría alguna sorpresa escondida para nosotros.


Sin saberlo otro amigo de la "Tribu Amigos en Kombi", también había estado haciendo contacto con ellos ya desde hace algún tiempo atrás, Juan Carlos Palacios artista de corazón, al que cariñosamente lo denominamos Indio Pintura Fresca, pero yo me tomaré el atrevimiento para este artículo de cambiar su sobrenombre a Arcoiris, debido a que mirar una obra realizada por las manos de este tan grande y valioso amigo y artista es un halago a los ojos, una fiesta de formas y colores; bueno, volviendo a la narración Juan Carlos propietario de una Kombi denominada "La Coqueta" había estado de manera más cercana en contacto con esta pareja de Argentinos y debido a que ellos también venden algunas cosas lindas para generar algo de dinero en ruta, Juan Carlos Palacios (La Coqueta) les había invitado al parque El Ejido y les permitió compartir su espacio, para que pudan exponer a los caminantes y deportistas sus productos. 


Algunos ya podrán imaginar la sorpresa que recibimos, el día Domingo bajo un clima definitivamente hermoso, el sol radiante y un cielo absolutamente azul, apenas  salía de la Iglesia recibí una llamada de Che Palacios (La Coqueta) invitándome a conocer a un grupo de Amigos que habían llegado al Ecuador en una Kombi llamada, ...si precisamente Huella La Kombi Rutera, vaya que bella sorpresa tras haber estado postergando una y otra vez los encuentros por falta de tiempo, parecé que por fin los conoceríamos, encendí mi Kombi (La Peccossa) e inmediatamente partí sin detenerme casi en ningún semáforo (todos estaban en verde, bueno casi todos), y al llegar al parque, no lo podía creer, no habían llegado a la cita!!! 




Estacioné mi Kombi y bajé de la Pecossa a saludar a Che Palacios e inmediatamente le pregunté y qué pasó con los amigos de Huella?, él en tono algo triste dijo quedaron en llegar hace una hora pero al parecer no van a venir. No!!! nuevamente el destino parecía postergar este momento, no lo puedo creer,  de todas formas decidí esperar un tiempo más, resistiéndome a retirar a cumpir con unas obligaciones pendientes, el tiempo pasaba y nuestros amigos no llegaban, decidí entoces despedirme para salir a cumplir las obligaciones, pero a lo lejos pudimos ver que la Kombi Rutera se aproximaba, que alegría al fin el tan esperado encuentro. Como  llegaron algo tarde ya no había disponible ningún espacio para colocar a Huella, en vista de que tenía que salir, decidí ceder mi lugar para que Martín estacione a Huella, tras como una hora de retro, primera, retro, primera, Martín logró colocar a Huella junto al parque, Maru saltó de la Kombi y me dio un gran abrazo, de esos que se sienten hermosamente sinceros, Martin también bajó de Huellas y saludó muy amigablemente, que placer fue conocerlos al fin el tan esperado encuentro se había dado, La Pecossa se encontraba haciendo una segunda fila en la calle principal, pero bueno el gusto de conocerlos valía la pena de exponerla a una multa de la policía y algún apelativo nada cariñoso de alquellos conductores nerviosos. Brevemente justificaron su retrazo debido a un problema eléctrico, había que empujar a Huella para encenderla y justo en el lugar que estaban hospedados, Huellas había sido corchada por otro automóvil que dificultaba su salida....bueno en fin pero se dio el encuentro. Me voy les dije pero regreso lo más pronto que pueda.



Tras un par de horas volví, estacioné en el parque y salí con mi cámara de fotos,  Patricio Quimzo (La Sankuda) junto a su esposa Teresita y su hijo ya estaban alli, también estaba Juan Carlos Palacios ( La Coqueta) con Indirita su hija compartiendo con esta linda pareja, tras saludar nuevamente comenzaron las fotos, Teresita sacó un Yogourth delicioso y compartió con todos, mientras conversabamos alegremente, en ese momento llegó una pareja que venía siguiendo a Huellas a través de las redes sociales e hizo una donación de ropa, juguetes y algunas cosas más, que alegría prevalecía el corazón abierto de los ecuatorianos, una verdadera satisfacción ver la solidaridad de alguien que jamás habíamos visto y que se solidarizaba con unos amigos viajeros. Bueno vimos algunos juguetes lindos y no pudimos resistirnos a sacarlos de la caja y jugar en la tierra como si fuesemos unos niños otra vez. Interesante conocer a estos viajeros que no tenían ningún problema de sentarse en un sitio lleno de tierra y jugar con unos carros que apenas hace un par de minutos nos habían regalado, por supuesto que estabamos bajo la mirada de los caminantes, que no quiero imaginarme lo que pensaban de nosotros, pero en fin fuimos inmensamente felices, así terminó la tarde entre risas, anécdota e historias de ruta. Por supuesto que quedamos en encontrarnos nuevamente mientras permanezcan en Quito llamada también "La Carita de Dios"






Es así que una noche me llamó Patricio (La Sankuda) y me dijo que nuestros amigos habían tenido un problema con una pérdida de gasolina, hablo de incendio en el motor, según lo que me indicó el problema era bastante grave, salí entonces a ver de inmediato en qué podía ayudar, llegué a la dirección indicada y vi a Huella estacionada con cara de "Tengo Incontinencia auxiiiiliio", puse mi vehículo tras de Huella y encendí los faros para poder ver qué pasaba, Martín me indicó casi con lágrimas en los ojos (estoy exagerando) el problema de huella, había que darle una solución urgente, asi que le pedimos a Martín que compre una masilla que al endurecer se hace muy muy dura, en eso ya llegó Patricio Quimzo (La Sankuda) presto también para ayudar, tras unos minutos inició la reparación, limpiadita por aqui otra por allá, la lijada de confianza para que el material se sujete bien al metal y un breve toque de enbellecedor para que la reparación no se vea mal, es aqui en donde el destino nos dio la sopresa, había aparecido por el sitio un amigo de los escarabajos tratando de ver cómo ayudar, también de repente un chico que hacía radio y como Martín y Maru comunicadores de profesión, también hacen radio en la ruta  fueron en ese mismo momento invitados a una reunión de comunicadores algo importante parecía, luego apareció el dueño de la Hostería que alojaba a esta pareja e inmediatamente nos hicimos amigos, casi al instante sabíamos que era un VW de corazón y en un par de segundos estaba invitado al viaje que estamos planeando al Cuzco. Fue una cosa de locos definitivamente, en un momento era un sufrimiento para los Visitantes y al siguiente instante una reunión de nuevos amigos, claro como para cerrar con broche de oro llegaba Ana Cris con nuestro lindo y nuevo integrante Ignacio un perro precioso que subió a mi auto como si fuese dueño y dejo algunos de sus pelitos en los asientos, pero no importaba también fue una linda sorpresa conocer a mi proximo copiloto de ruta.



Entonces finalizada la reparada estacionamos a huellas en un lugar más seguro dado que la persona que les prestaba el espacio para estacionar viendolos extrangeros quiso cobrar por una reparación que nunca la hizo  y que nunca se la pidió un valor excesivamente alto ($150USDD), perdón a todos pero creo que en todo país hay un simberguenza. Ahora si tiempo de disfrutar un momento entre amigos




Remolcamos a Huellas a un estacionamiento más seguro para dejarla toda la noche y asi el material se endurezca y les permita partir hasta solucionar el inconveniente de manera definitiva. Juan Carlos Andino  (La Sorda) otro amigo de la tribu se contactó con su maestro de cabecera para que nos ayude solucionando cualquier problema de Huella. Al otro día el maestro Mono verificó la reparación del día anterior y validó el trabajo, aprovechó para cambiar una pieza de la caja de cambios y regurlar bábulas. Martín salió a probarla y quedó muy satisfecho con el trabajo, tan contento estaba que se nos quería llevar a nuestro maestro hasta su destino final. 

Compartimos una noche muy divertida con los amigos de la tribu, y estos simpáticos amigos, cabe indicar que es la única pareja a la que no los acompaña un perro, cosa que nos pareció extraño en algún momento dado que todos los visitantes hasta ahora que hemos tenido el gusto de conocer han venido escoltados con uno o más perros en su Kombi, a estas mascotitas les dedicaremos una reseña en lo posterior.

Es así que termina esta historia, pero inicia una amistad un abrazo queridos amigos y felices Rutas



1 comentario:

  1. Grande Freddy! esta buenisima la entrada! esta amistad continua... y por supuesto ahora cunado volvamos a Quito nos volvemos a juntar! Abrazo grande a toda La Tribuuuuuuuuuuu!

    ResponderEliminar